
Los 3 errores más comunes a la hora de afrontar una competición.
Cuando ganar es todo: en las competiciones si nos enfocamos en ganar estamos cometiendo un error y de los grandes. No todo en esta vida es ganar o quedar el primero, porque si tienes esas expectativas tan altas y no se llegan a cumplir, las consecuencias pueden resultar una pesadilla. Lo mejor es superarse a sí mismo en cada competición, el mejor rival abatir debes ser tú mism@.
Sobreentrenar: en gimnasia rítmica tenemos poco tiempo el día de la competición para tocar el tapiz de entrenamiento y queremos hacer mil cosas en esos segundos. Sin embargo, si ese tipo de entrenamiento no se ha trabajado con esa intensidad y con esa rapidez anteriormente, puede provocar bloqueo mental, agotamiento o lesiones. Como consecuencias más comunes:
- Disminuye el rendimiento óptimo.
- Produce más tensión o nervios.
- Y se pierde la atención y la concentración.
Emociones negativas: a veces, nuestras emociones más negativas ya las llevamos en la mochila el día de la competición, bien porque hayas tenido un problema personal o porque haya un motivo de dicha competición que te pueda estar afectando. En estos casos, el problema es que no estarás al 100% de tus posibilidades. Hay que intentar buscar un equilibrio emocional y para ello es necesario entrenar las emociones:
- Para poder controlarlas.
- Dejar que no afecten.
- Aprender a usarlas como motor.